
Catedral de San Basilio, Moscú
La Catedral de San Basilio, o Catedral de la Intercesión de la Virgen en el Montículo, se erige en la Plaza Roja de Moscú, en Rusia. Esta iglesia ortodoxa es el símbolo tanto de Moscú como de Rusia y la singularidad de su edificación es única en el mundo. La construcción de este espectacular templo fue realizada a cargo de Iván el Terrible en 1.555 y se tardaron seis años aproximadamente en finalizarla. Hoy en día este santuario es filial del Museo Estatal de Historia.
Su nombre original se modificó a Catedral de San Basilio, tal y como la conocemos hoy, debido a que en su interior se encuentra la tumba de San Basilio Bendito, un pescador humilde que fue denominado Santo por su capacidad para la videncia y curar a los pobres. La característica principal de esta maravillosa y única construcción son sus torres de ladrillo rojo que finalizan en coloridas cúpulas abulvadas. El templo está formado por nueve de estas cúpulas que cubren nueve capillas dedicadas a nueve santos diferentes. Ocho de las bóvedas se disponen rodeando un capitel central, formado por la novena bóveda, simulando así una estrella de ocho puntas. La torre central es la más alta, ya que alcanza 47,5 metros y todas ellas tienen colores, formas y alturas diferentes.

El interior de la Catedral está lujosamente ornamentado
Por otra parte, el interior es mucho más sobrio y mesurado que el imponente aspecto exterior. La iluminación es más leve y por todo su recorrido abundan imágenes florales en tonos pastel. Sus pasillos son laberínticos y unicamente se interrumpen por pilares dispuestos verticalmente en los que se encuentran los grandiosos portones que van a parar a las capillas.
Aislando el presbiterio y el altar de las iglesias, se ubican los iconostasios: una mampara de tres puertas con acabados en oro y con representaciones de la Virgen y de su hijo. De estas paredes, la más impresionante la podremos encontrar en la Capilla de la Intercesión, que, con 64 metros cuadrados es la más grande de todas. A esta estancia, que data del siglo XVI, podremos acceder a través de una escalera de madera que tiene forma de caracol. Tampoco debemos perdernos la galería interior que rodea la Catedral y en donde se encuentra representada una hermosa imagen de una cruz de doce puntas.

Imagen del interior de la Catedral de San Basilio
Por otra parte, en el jardín de la iglesia, podremos contemplar una estatua de bronce realizada como conmemoración a Dmitry Pozharsky y a Kuzmá Minin. El primero era un príncipe, el segundo un mercader, y ambos llegaron a convertirse en héroes de la nación rusa por su papel alistando a reclutas para que lucharan contra los invasores polacos.
Como podemos confirmar, la visita a la Catedral de San Basilio es obligada para todos los que viajemos hasta Moscú, ya que está perfectamente acondicionada y reparada para que podamos observarla en toda su gloria. Podremos acceder a ella durante todos los días del año, exceptuando los martes, que se encuentra cerrada para el público.
Más información | Portal Internacional de Moscú
Fotografía | ailegorairam, Claudio Emilio y pinchoaguilera
A vista de pájaro | Google Maps