Basílica de Santa María de Cracovia, una iglesia gótica que no debes perderte

En plena plaza Central de Cracovia hallamos la basílica de Santa María, una iglesia de estilo gótico que data del siglo XIV
8 de octubre de 2011
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basílica Santa María Cracovia

Fotografía tomada desde abajo de la basílica de Santa María de Cracovia

Nada más entrar en la plaza Central de Cracovia, en Rynek Glówny, un edificio sobresale por encima de todos: la basílica de Santa María. Se encuentra amarrada muy cerca del mercado de los Paños de Sukiennice, del cual os hablamos hace unos días. Han pasado tres semanas desde mi visita y todavía continúo bajo su embrujo. Esto es debido al sabor que deja en el paladar que, como el buen vino, mejora su fragancia con el paso del tiempo.

Estamos ante una iglesia de estilo gótico que comenzó a edificarse a mediados del siglo XIV, en el año 1355, con una arquitectura bastante diferente a la que podemos encontrar en España. Lo podéis comprobar echando un vistazo al artículo que elaboramos sobre la catedral de Burgos, uno de nuestros estandartes.

basílica Santa María Cracovia Polonia

Uno de los laterales de la basílica gótica de Santa María de Cracovia, Polonia

El color pardo del exterior se debe al empleo de ladrillos en su construcción. Para levantar semejante obra de arte, los vecinos de la ciudad se unieron para competir con la catedral de Wawel. Como bien dijo el ilustre don Lope de Vega, “como Fuente Ovejuna, todos a una”.

Anteriormente existía una iglesia del siglo XIII pero fue parcialmente destruida en el año 1241 por el ejército tártaro. Con la intención de aprovechar el material, se construyó encima de sus cimientos la actual basílica, condicionando por este motivo su orientación.

La portada está custodiada por dos torres de diferentes tamaños con ventanales acabados en arcos góticos que miran hacia los cuatro puntos cardinales. El levantamiento de las mismas se realizó entre los años 1400 y 1406. La más alta mide 81 metros de altura, sirve de vigilancia y en el año 1666 se colocó una corona dorada en la que se dice que está escrita la historia de la ciudad. La otra torre, su hermana menor de 69 metros, contiene una cúpula renacentista y oculta el campanario que oficia las celebraciones con sus cinco campanas.

basílica Santa María Cracovia

Los vivos colores del interior de la basílica de Santa María de Cracovia deslumbran al visitante

Si os soy sincero, no esperaba encontrarme gran cosa al cruzar el transitado umbral de la plaza Central en dirección al templo espiritual. De acuerdo, un fastuoso pórtico barroco del siglo XVIII diseñado por Francesco Placidi me daba la bienvenida. Sin embargo, la visión de los ladrillos del exterior me impedía imaginarme la esplendorosa gama de colores que me aguardaba en el interior.

La basílica de Santa María de Cracovia está envuelta por entero en las redes de un sempiterno mural. Sus diversas tonalidades zigzaguean los arcos que dividen las tres naves e izan su bandera a través del apuesto mármol. El responsable de este regalo para la vista es Jan Matejko, considerado como el más ilustre pintor histórico polaco. Como no podría ser de otra forma, el entorno es luminoso, acrecentado por la altura propia del estilo gótico de las iglesias para colocar amplios ventanales. El matiz dorado está presente en todas partes de forma sutil, creando un nexo de unión entre los colores pastel de los pilares y el azul turquesa del techo.

basílica Santa María Cracovia

El dorado, el azul turquesa y el color pastel se unen en la basílica de Santa María de Cracovia

Las sorpresas no acaban aquí. El retablo medieval de madera más grande de Europa, tallado en algo más de una década en el último cuarto del siglo XV, nos recibe en el este de la capilla. Sus engreídas dimensiones turban al viajero, con aproximadamente 13 metros de altura por 11 de anchura. Otra noble pieza, esta vez de arenisca, coquetea con nuestra mirada. Es un crucifijo de piedra situado en un altar barroco en la nave derecha. Ambas son obras del escultor alemán Veit Stoss, uno de los más destacados de su época.

En la basílica de Santa María de Cracovia hay cabida también para el art nouveau. Se puede apreciar en las vidrieras situadas encima de la tribuna del órgano, obras surgidas de la colaboración de los artistas polacos Józef Mehoffer y Stanislaw Wyspianski.

Plaza Central Cracovia basílica Santa María

Todos los focos de la plaza Central de Cracovia señalan a la basílica de Santa María

El silencio en el interior de la basílica de Santa María es sepulcral. Habéis de saber que el cristianismo está robustamente implantado en Polonia y gente de todas las edades demuestran su fe a diario en las iglesias. Este hecho contrasta con una España que ve disminuir los fieles más jóvenes año tras año. Yo, al menos, nunca he visto medio centenar de personas siguiendo la misa desde el exterior de una iglesia a través de altavoces porque no cabían adentro, pero sí lo avisté en la capital de invierno de Zakopane. Como muestra de esta devoción, deciros que se puede apreciar una placa conmemorativa del que fuera papa Juan Pablo II, antes arzobispo de la metrópoli.

Cada hora, un trompetista hace surcar una melodía tradicional polaca de cinco notas por el cielo de Cracovia. La armonía se llama Hejnal mariacki y se da la curiosidad de que se transmite esta misma sintonía en una emisora de radio en todo el país. Este acto se remonta a muchos años atrás y la leyenda dice que en él se conmemora el asesinato de un trompetista a causa de la invasión tártara en el siglo XIII cuando estaba dando la voz de alarma. Una flecha perforó su garganta y, con ella, la afonía se instauró de súbito en la urbe. Por esta razón, a la torre más alta desde donde se toca la melodía se la conoce como la torre Hejnal.

No recuerdo haberme sorprendido tanto con una iglesia a excepción de una que tuve la oportunidad de contemplar en Puebla, México. Estaba bañada en oro, de pies a cabeza. Así que ya lo sabéis, no os podéis perder la visita a la basílica de Santa María ni dejar de indagar el interior de los edificios (y de las personas) por la apariencia de sus fachadas.

Más información | Krakow y Wikipedia (en inglés)
Fotografías | Xabier Villanueva Amadoz
A vista de pájaro | Google Maps
En Viajeros Blog | De visita por Kazimierz, el barrio judío de Cracovia

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